miércoles, 8 de mayo de 2013

Breve historia del masaje infantil


La asociación Internacional de Masaje Infantil, fue fundada por Vimala Mc Clure.
En muchas culturas ,dar masaje a los bebés es un arte transmitido de generación en generación. Vimala combinó sus experiencias sobre los efectos positivos del masaje hindú y sueco, así como los principios del yoga y la reflexología.
Vimala diseñó un método especial para los bebés con cólicos y sin síntomas de cólicos, asi como la técnica de los "Toques de Relajación"; además , diseño un curso completo para padres, éste curso fue presentado en 1976 y se convirtió en la base del programa de la ACHMI (Asociación Chilena de Masaje Infantil).




Cómo surge la idea de Vimala Mc Clure.                                

En 1973, cuando tenía 21 año, estaba trabajando en un pequeño orfanato al norte de la India.

La mayor parte de mi tiempo consistía en trabajos para sobrevivir, lavando ropa, transportando agua, cocinando extraños alimentos en un fogón de arcilla que funcionaba con estiércol de vaca. Las niñas a nuestro cargo estaban siempre enfermas, y desde el momento en que llegué anhelaba volver a casa.
Gradualmente me adapté a los rigores de mi nueva vida. Empecé a amar a las niñas y a encontrar formas no verbales para comunicarme con ellas. Las niñas mayores me enseñaron a cocinar y a dar masajes a las más pequeñas con aceite de mostaza. Yo les enseñe cómo bajar la fiebre y cantar "This old man".
Teníamos  muy poco para comer, algunas veces nosotras ayunábamos para que las niñas pudieran comer. Había escasez de alimento y desde nuestra casa veíamos fuera como crecía cada día la larga cola para obtener raciones, bajo un calor de 43 grados centígrados.
Durante mi última semana allí, contraje la malaria. Mientras deliraba a causa de la fiebre, las mujeres me cuidaban, me daban masajes y me cantaban haciendo turnos hasta que la fiebre por fin disminuyó. Nunca podré olvidar la sensación de sus manos tocándome.
Finalmente, cuando me dirigía a la estación, el "riskhaw" que me llevaba paró para dejar pasar una carreta tirada por búfalos. A mi derecha vi una cabaña, hecha con algunos tablones y lonas junto a la carretera, donde vivía una familia.
Una joven madre, sentada en la suciedad, tenía a su bebé en las rodillas, le daba masaje amorosamente y le cantaba. la miré y recuerdo que pensé que la vida es mucho más que el bienestar material. Aún teniendo tan poco, aquella mujer podía ofrecer a su bebé aquel hermoso regalo de amor y seguridad, un regalo que ayudaría a su hijo a convertirse en un bondadoso ser humano.
Pensé en todos los niños que había conocido allí y en lo amorosos y cálidos que eran a pesar de sus desventajas. Cuidaban los unos de los otros, aceptaban sus responsabilidades sin ninguna objeción. Pensé que quizás eran así porque de bebés habían sido amados de aquella manera .
Una semilla había sido plantada en mi mente, y volví a casa llena de ilusión hacia el futuro y a la vez triste por lo que debía dejar atrás.